Educación para la salud oral: los mayores enemigos de tu boca

Cuando se habla de salud oral tiendes a pensar en que hay que lavarse los dientes varias veces al día. Como higienista dental debes ir más allá y dar consejos de salud oral no solo hablando de cómo lavarse los dientes y con qué frecuencia.

En este artículo te hablaremos sobre todo de 2 enemigos de tu boca: el tabaco y el alcohol.

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La salud oral según la Organización Mundial de la Salud (OMS)

Según un informe de la OMS de 2012, la salud bucodental es el punto débil de la población mundial. Aquí los datos hablan por sí solos:

  • Prácticamente el 100% todos los adultos del mundo tiene caries.
  • Entre un 60% – 90% de niños en edad escolar tienen caries.
  • Las enfermedades periodontales graves afectan a un 15% – 20% de adultos entre 35 y 44 años y pueden derivar en la pérdida de dientes.
  • Los problemas bucodentales son más frecuentes en grupos de población con escasos recursos económicos.

Fuente: http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs318/es/

Es obvio que la salud oral dependa de la zona donde estemos y las diferencias de los países desarrollados con los países pobres son muy notables.

Los principales enemigos de la salud oral

Tener problemas en la boca afecta a la masticación, la mordida, al habla y todo lo que suponga abrir la boca. Por tanto la salud bucodental es vital para el bienestar físico y psicológico.

Vamos a centrar este artículo en la salud bucal en los adultos y no podemos dejar de hablar de las 2 sustancias que más les afectan: el tabaco y el alcohol.

Tabaco y salud oral

Aunque hay quien se resiste a creerlo, el tabaco no solo afecta a los pulmones sino se trata de uno de los principales enemigos de la boca.

No en vano la boca es la puerta del entrada del humo del tabaco a tu organismo, el cual irrita las mucosas orales.

Además, el tabaco tiene los siguientes efectos nocivos en nuestra boca:

  • Mal aliento por el propio olor del tabaco o por las variaciones que causa en la microbiota bacteriana de la boca.
  • Retraso en la cicatrización de cualquier herida de la boca. Esto es debido a la nicotina y al monóxido de carbono de los humos del tabaco.
  • Los fumadores suelen tener más problemas con los implantes dentales.
  • Efectos directos perjudiciales en las encías. Las causas son las mismas que en el retraso de cicatrización.

Esto nos lleva al análisis de las enfermedades periodontales en los fumadores, cuya incidencia es más alta en ellos que en la población no fumadora: de 5 a 20 veces más alta.

Una enfermedad periodontal asociada al tabaquismo supone deterioro de los tejidos que sostienen los dientes, pérdida de hueso, formación de bolsas periodontales e incluso pérdida dental.

Los fumadores con periodontitis responden peor a cualquier tratamiento, tanto quirúrgico como no quirúrgico. También presentan más periodontitis reincidentes.

Otra de las patologías más importantes e incluso mortales que los fumadores tienen riesgo de padecer es el cáncer oral.

El tabaco tiene más de 60 productos de combustión con capacidad de unirse al ADN y modificarlo. Si esto ocurre se produce un cáncer.

El riesgo de padecer cáncer oral en fumadores es hasta 5 veces mayor que en no fumadores. Esto se multiplica por mucho cuando el fumador es además consumidor habitual de alcohol.

Las lesiones bucales con riesgo de volverse cancerosas (ocurre en un 10% de los casos) son las leucoplasias, las cuales se atribuyen principalmente al tabaco.

Alcohol y salud oral

El consumo habitual de bebidas alcohólicas provoca mal aliento, seca la boca y deteriora los dientes.

¿Por qué el alcohol provoca desgaste en los dientes? La razón es la acidez de las bebidas alcohólicas. El pH de una boca sana varía entre valores de 5,6 – 7,6. Las bebidas alcohólicas tienen un pH menor que 4,5. La mezcla de la saliva con el alcohol hace que el pH baje, lo cual provoca caries, erosión e incluso desmineralización de los dientes.

La acidificación de la saliva también es un peligro ya que provoca que el número de bacterias que pueden provocar caries y otras enfermedades crezca.

La proliferación de bacterias también provoca mal aliento. Cuando el exceso de bacterias entra en contacto con los alimentos se producen una serie de compuestos derivados del azufre que desprenden mucho olor. Esto es perjudicial para tu salud bucal y además desagradable para quien esté a tu lado.

El vino es una bebida muy popular en la dieta mediterránea. Tiene muchas cosas positivas pero para los dientes puede ser perjudicial porque los taninos que contiene pueden teñir los dientes. Hay otras bebidas alcohólicas que también contienen compuestos agresivos para los dientes que pueden provocar la aparición de manchas.

Si el alcohol perjudica la dentadura, no digamos los combinados de bebidas alcohólicas con las gaseosas. Al efecto nocivo del alcohol se suma la gran cantidad de azúcar de las bebidas carbonatadas.

Con todo lo que hemos dicho quizá pienses que lo primero que debes hacer es cepillar tus dientes nada más tomar una bebida alcohólica. Sin embargo es todo lo contrario, no debes hacerlo. La razón es que el alcohol acidifica la boca, lo cual hace que el cepillado se vuelva agresivo para los dientes.

El café y el  té, las bebidas aparentemente inofensivas

El café y el té son bebidas habituales pero consumidas en exceso puede ser muy dañinas para el esmalte.

De todas las variedades de té existente, el negro es el que más manchas dentales provoca. Pero incluso los tés blancos y de hierbas son capaces de erosionar el esmalte.

Si quieres conservar tus dientes, no olvides las frutas y las verduras en tu dieta

No abuses del alcohol ni del tabaco porque ponen en peligro tu salud oral. Los higienistas dentales también son educadores, por tanto es parte de su cometido motivar a los pacientes para que dejen el tabaco y el alcohol, o al menos reduzcan considerablemente su consumo, especialmente en los casos en los que se ve claramente que les están suponiendo problemas para su salud oral.

Si quieres prevenir todo tipo de enfermedades de la boca, lo mejor que puedes hacer es consumir frutas y verduras. Estos alimentos protegen contra los cánceres en la boca. Es el mejor regalo que puedes hacerle a tu salud oral.

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